EN LA CASA DEL “NUEVO RICO” PANAFRICANISTA
Para aquellos que vivieron en Guinea
Ecuatorial en la época anterior a la producción del petróleo recordarán que
nadie se paraba a preguntarse sobre quién era de Malí, Camerún, Burkinafaso o de la China continental. Todo
lo contrario, éramos un país acogedor y, gracias a la solidaridad de los demás,
se nos tapaban muchas de nuestras vergüenzas que hoy pretendemos ignorar.
En este articulo, que dedicamos hoy al
calvario que padecen los extranjeros hoy en Guinea Ecuatorial, queremos empezar
con una pregunta que dirigimos desde aquí a toda la gente consciente de nuestro
país: ¿es un delito no tener papeles
en regla en nuestro país?
Nosotros pensamos que no lo es. Es más, es,
seguramente, una infracción administrativa; una infracción a la que contribuyen
en agravar los mismos funcionarios públicos, que no hacen su trabajo. Si
hicieran su trabajo, la mitad de los sin papeles
tendrían papeles y la otra mitad jamás habrían aterrizado en Guinea Ecuatorial.
Vamos así, casi para una semana… a los
extranjeros los acorralan en cualquier rincón, los golpean salvajemente, los
tuercen los dedos, los lesionan física y psíquicamente; y como si eso fuera
poco los atacan ya sin uniformes para pillarlos con más facilidad y está en
marcha la OPERACIóN
PUERTA A PUERTA. Ningún responsable a salido para explicar a la
opinión pública el por qué de todo eso… y los patéticos embajadores africanos,
sobre todo de Nigeria y de Camerún, están como si no pasa absolutamente nada.
¿No será que países como Nigeria y Camerún son más patéticos que Guinea
Ecuatorial?
¿Cómo nacen
los sin papeles, en Guinea Ecuatorial?
A raíz de la persecución que está teniendo
lugar en nuestro País Panafricanista
en los pasados días en contra de los extranjeros (sobretodo de origen africano),
los reporteros de la Radio Macuto, La Voz de los Sin Voz, se han
puesto a analizar la raíz de este problema y el por qué no va a tener solución
de inmediato salvo que ocurra algún milagro, de esos que ya no se dan en
nuestros días.
Todos, absolutamente todos los sin papeles, en Guinea Ecuatorial, los CREA el
mismo régimen o los prohombres del mismo. La inmensa mayoría de los sin papeles llegan
a nuestro País Panafricanista atraídos
por prohombres y mujeres del régimen en sus numerosos viajes en el extranjero,
sus hijos que viven o estudian en el extranjero prometiendoles grandes sumas de
dinero. Una vez en el País
Panafricanista se les retira la documentación que, en la mayoría de los casos
pagan los mismos prohombres, y el dinero prometido suele caer en el olvido.
Decidan continuar con el amo inicial o decidan ir a buscarse la vida, el
extranjero se queda sin papeles en el País
más Panafricanista del Planeta.
Hay extranjeros que, atraídos por la falsa
bonanza del País Panafricanista, se
aventuran en pateras para llegar, como sea, a la Tierra Prometida. Cada vez que
sale una petera de su punto de origen, solo ocurren tres cosas: la patera se
hunde y se mueren sus ocupantes; son interceptados por militares panafricanistas, corruptos hasta la
coronillas, los cuales les cobran una suma millonaria por cabeza para llevarles
a buen puerto, cobrando doble a las mujeres embarazadas y sustrayendo objetos
de valor a los comerciantes; si la patera llega a buen puerto por sus propios
medios, se repite el ejercicio, pagan también sumas millonarias para que les
deje pasar la misma policía que al día siguiente se encargará de perseguirlos.
¿Señores, es esto justo?
Otros quieren hacer papeles pero los funcionarios
responsables no los dejan.
Muchos sin papeles
se quedan en la calle después de haber trabajado, sin cobrar, para un general,
un ministro o la mismísima pareja presidencial. Generalmente, técnicos bien
cualificados, futbolistas o músicos profesionales, engatusados por esa “Guinea
Ecuatorial” que se ve en las maquetas en Internet y repetidamente enseñada en África 24h, se quedan en la
calle, sin papeles, y acaban de
serenos, lavando coches o haciendo trabajos de peón.
Hemos visto camiones llenos de chinos y
africanos y la policía Panafricanista
“controlando” descaradamente a los negros y los chinos tan tranquilos.
¿Cómo se puede salir de este atolladero?
La primera medida para dar coto a esos
abusos debería salir de las embajadas acreditadas en el País Panafricanista pero resulta imposible ya que los embajadores
africanos están en el País
Panafricanista solo para servirse y están enroscados en negocios de todo
tipo con los generales Panafricanistas
mientras sus ciudadanos están siendo puestos a parir por la misma policía Panafricanista.
De forma rutinaria los miembros de las
Fuerzas Armadas entran uniformados en las abacerías de los extranjeros donde
pueden tomar agua mineral, zumos o llevarse tabaco, etc, ¡SIN PAGAR! Cuando se
declara un “control”
contra los extranjeros, se convierte en una especie de caza de brujas; los
extranjeros tienen que esconderse como si fueran delincuentes. Muchos operan en
pequeños y medianos negocios que pertenecen a guineanos ante los que no dejan
de desfilar agentes de Hacienda, Medio Ambiente, Ayuntamientos, etc, para
recoger impuestos, que, teóricamente, deberían contribuir al Tesoro Público.
¿Cómo van a pagar esos negocios sus impuestos si sus operadores se esconden de la
policía, los otros Agentes
Panafricanistas?
NO OLVIDEMOS QUE HAY GUINEOECUATORIANOS EN TODAS PARTES DEL MUNDO.